VICENTE VERDÚ Aprender sin sacrificio ni autoridad
Pero ese mundo en que el dolor, o el ahorro o la represión sexual, tenían sentido es ya un mundo acabado. Tan acabado como el invocado respeto a la autoridad.Todas las instituciones y sus máximos representantes, desde la política a la iglesia, desde los bancos a los medios de comunicación, se hallan desacreditados. Respetar a la Autoridad se contradice con este desprestigio al que contribuye no sólo la escandalosa corrupción de las autoridades sino el auge del poder en red.
La generación en red se ha formado en la participación y la interacción, no en la obediencia a un jefe. Los líderes en la red lo son por su capacidad de emulación, y el grupo (también en las empresas, también en la ciencia) se constituye en fuente de intercambio de saber. No es un faraón del conocimiento quien imparte doctrina, sino que la doctrina o el conocimiento se realizan en cooperación: en la propuesta y su cola de correcciones. Quien no entienda esto será presa del pasado. Más pegajoso que instructor, menos sabio que impertinente.
INGER ENKVIST Enfatizar el pensamiento
Hay que reforzar el currículo de historia, geografía, literatura e historia de las religiones. Además hay que tener un currículo de ciencias naturales exigente para que todos aprendan a pensar racionalmente. Hay que insistir en los colegios en que nadie pasa de año sin haber aprendido el plan de estudio del año. Es una costumbre absolutamente negativa colocar a los alumnos juntos por la edad y no por su nivel de estudios.
Hacer como los finlandeses: montar un sistema amplio y bien financiado de enseñanza de apoyo. A la vez, mantener el respeto al profesor y exigirles a los alumnos una conducta apropiada y mucho trabajo con las tareas. En ningún caso se puede aceptar una conducta irrespetuosa en un centro de educación. Además, en Finlandia, después de la edad de los 16 años, la mitad de los alumnos es dirigida hacia la formación profesional y la otra hacia la preparación para la universidad.
Richard Light dice en un famoso estudio sobre 10.000 estudiantes que han cursado su licenciatura en Harvard que lo más valioso ha sido:
-Las tareas de investigación y escribir informes.
-Conocer a gente de diferente origen social y étnico.
Estos estudiantes, diferentes de ellos mismos, están en su mismo nivel y tienen los mismos intereses. Ese es el problema con la escuela comprensiva tal como se entiende muchas veces: los alumnos no están en el mismo nivel y no tienen los mismos intereses. Por eso, más bien constituyen estorbos los unos para los otros y no resultan ser contactos humanamente valiosos.
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