viernes, 3 de diciembre de 2010

castigat sense esbarjo!

Qui no ha patit en les seues pròpies carns o en les dels seus fills l'estar castigat sense esbarjo? Em sembla que és el càstig estavella en molts col·legis i no obstant això jo pense que hauria d'estar prohibit. Els professors addueixen que l'esbarjo és una mica el que els agrada molt als xiquets i per tant castigar sense ell té efecte; que són molts alumnes al seu càrrec i que han de prendre mesures dràstiques per a arreglar els conflictes. Jo dic que pot ser que tinga un efecte immediat. Però mai a llarg termini, com ocorre amb tots els càstigs, el seu efecte és contraproduent, doncs pertorba encara més les relacions. Però en aquest cas és encara pitjor, doncs li impedeix al xiquet desfogar-se després de l'obligada immobilitat de moltes classes. I aquesta immobilitat precisament és en ocasions la causa del mal comportament. L'estona de pati hauria de ser intocable i els mestres haurien de cercar altres mètodes per a arreglar els conflictes. El diàleg i l'escolta activa, donar-los responsabilitats i la confiança són estratègies potser més lentes, però sens dubte molt més eficaces a llarg termini. I si es veu necessari, que el càstig siga una conseqüència directa dels seus actes i no una mesura tan arbitrària com deixar-los sense la seua imprescindible expansió.



¿Quién no ha sufrido en sus propias carnes o en las de sus hijos el estar castigado sin recreo? Me parece que es el castigo estrella en muchos colegios y sin embargo yo pienso que debería estar prohibido.
Los profesores aducen que el recreo es algo que les gusta mucho a los niños y por tanto castigar sin él tiene efecto; que son muchos alumnos a su cargo y que deben tomar medidas drásticas para arreglar los conflictos. Yo digo que puede que tenga un efecto inmediato, pero nunca a largo plazo. Como ocurre con todos los castigos, su efecto es contraproducente, pues perturba aún más las relaciones. Pero en este caso es aún peor, pues le impide al niño desfogarse después de la obligada inmovilidad de muchas clases. Y esta inmovilidad precisamente es en ocasiones la causa del mal comportamiento.
El rato de patio debería ser intocable y los maestros deberían buscar otros métodos para arreglar los conflictos. El diálogo y la escucha activa, darles responsabilidades y la confianza son estrategias quizás más lentas, pero sin duda mucho más eficaces a largo plazo. Y si se ve necesario, que el castigo sea una consecuencia directa de sus actos y no una medida tan arbitraria como dejarles sin su imprescindible expansión.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo en la arbitrariedad de muchos de los castigos por parte de profesores o cuidadores de comedor... aunque también de los padres, a veces, en casa, y eso que tenemos "sólo" uno o dos (algunos más) niños a los que reforzar conductas positivas o intentar eliminar negativas. Pero sí, desde luego quedarte sin el "recreo" era lo peor que te podía pasar...

Anónimo dijo...

Realmente educar nadie dijo que fuera fácil, tampoco madie nos enseñó a como hacerlo, aún más con el inconveniente de tender a repetir conductas y comportamientos que ya sabemos que no funcionan. Pero es interesante acotar los temas, en este caso, hablamos de los castigos escolares. Hablamos de unos espacios-tiempos controlados, que a su vez estan supervisados por profesionales de la educación que sí reciben formación y recursos para enseñar y educar. Y no se trata de una formación ligera y arbitraria, sino muy compleja y costosa, y que queda muy en evidencia cuando alguno de estos profesionales, le dicen a los padres "a ver que hacéis, que vuestro hijo/a no para en clase". Se está trasladando a la familia un problema y creando una frustración de un espacio-tiempo-organización del que no han participado lo deseable, salvo para dar su beneplácito confiando plenamente en estos profesionales. Y aquí está uno de los primeros descreditos de la función docente,que deja perplejo a las familias cuando en su ambiente controlado y con su formación solicitan la solución (no sólo el apoyo, que mayoritariamente existe), de un problema en la clase de .....

Realmente es un tema para reflexionar padres, docentes y alumnos.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo en lo de:
"El diálogo y la escucha activa, darles responsabilidades y la confianza". También en el último párrafo del pdf que habéis enviado por correo "La solució no ve, per tant, de cap
manual de drets i deures ni de cap tècnica
disciplinària, sinó de la reflexió i comprensió
constant dels problemes de classe per tots, per la
resolució de conflictes de forma compartida, per la
creació entre tots de normes de comportaments en el
centre i, sobretodo, per la participació i
responsabilización de l'alumnat en els elements
curriculars i en les decisions organitzatives i
polítiques del centre."
Es una tarea la que tenemos de reflexión y colaboración, de desarrollo de la educación democrática y participativa. AA ver si nos animamos todos. Ximo.